Atrás quedaron los días en que lucir un flequillo se sentía tonto o extraño. Ahora todo se trata de la individualidad, y un flequillo es un accesorio nuevo y genial.
Atrás quedaron los días en que lucir un flequillo se sentía tonto o extraño. Ahora todo se trata de la individualidad, y un flequillo es un accesorio nuevo y genial.